El narcotraficante y abigeo José Raúl García Castillo, (a) “El Rabo”, de 32 años de edad, hermanito del también narcotraficante Antonio García Castillo, (a) “El Huevito”, fue ejecutado de cuatro balazos y tirado en la carretera federal Tizimín-Río Lagartos, a dos kilómetros de la ciudad, rumbo a la comisaría tizimileña de Kikil. Fue “levantado” por varias personas que se movían en una Suburban blanca, alrededor de las tres de la madrugada.
Esta ejecución, con el tiro de gracia, fue interpretada como una advertencia al grupo de Alejandro Patrón Laviada, quien en la administración de su hermano Patricio Patrón Laviada utilizó el Oriente del Estado como base de operaciones para sus actividades de narcotráfico.
El ejecutado es hermanito del también narcotraficante Antonio García Castillo, (a) “El Huevito”, cuya familia mantiene una estrecha relación con Alejandro “La Vaca” Patrón Laviada y con el neobanquero Roberto Hernández Ramírez, ambos acusados POR ESTO! por sus vínculos con el narcotráfico desde 1997.
El cuerpo fue encontrado a 5 metros de la vía federal, atrás del alambrado dentro del rancho “Santa Fé”, a dos kilómetros de la caseta de la policía municipal; estaba boca abajo y aún así se notaban huellas de tortura.
A menos de un metro de sus pies estaba una de sus sandalias y su cabeza estaba sobre una gorra de color azul fuerte, en la que se acumuló abundante sangre. Vestía una playera de colores combinados, entre negra, blanco y gris, y un pantalón de mezclilla azul fuerte.
El hallazgo movilizó a las corporaciones de la policía federal, estatal y municipal. Estos últimos, al llegar por la mañana al lugar de los hechos, informaron que a las dos de la mañana su central de mando recibió el reporte de un escándalo con gritos y golpes en una calle ubicada a espaldas de la discoteca, donde subieron a una persona en un camioneta Suburban de color blanca, pero que no la ubicaron. En ese momento, la policía municipal no informó nada a las otras corporaciones.
La Policía Federal fue la primera en llegar al lugar y acordonó el área, en espera de la llegada del personal de la Fiscalía Genera del Estado, que al arribar encontró cerca del cuerpo los 4 casquillos percutidos. Al mover el cadáver encontraron que tenía impactos de bala en el pecho, hombro, cara y cabeza. Por cierto, a los elementos de la SSP no los dejaron llegar hasta el cuerpo.
Hasta el momento en que el cadáver fue levantado por el personal del servicio médico forense, se desconocía su identidad y fue hasta la tarde cuando se supo que se trataba del narcotraficante y ladrón de ganado y vehículos Raúl García Castillo.
Antecedentes
Raúl García Castillo fue detenido el 8 de marzo del año 2009, cuando fue sorprendido robando 3 reses, junto a Manuel Enrique Carrillo Herrera; en ese entonces contaba con 29 años de edad. Fue detenido por elementos de la policía municipal y la policía estatal en las calles del periférico del norte de la ciudad. Llevaban las tres reses en un Ford Fiesta con placas del estado de Quintana Roo.
El 12 de agosto del 2010 fue nuevamente aprehendido, otra vez con Manuel Enrique Carrillo Herrera. En esta ocasión estaban robando una lavadora y un refrigerador de un rancho ubicado en la carretera hacía Colonia Yucatán. Al notar la presencia de la patrulla de la policía estatal intentaron huir por un camino de terracería pero se les estalló un neumático y se les dio alcance.
En esa misma ocasión resultó que la camioneta Nissan estaquitas blanca con placas SZ-89-345 del estado de Quintana Roo tenía reporte de robo en ese mismo vecino estado.
Se sabe que junto a su hermano Antonio García Castillo se dedicaba a la distribución de drogas en el cabaret “El Corral”, propiedad de “El Huevito”, quien recientemente fue detenido por tener en ese tugurio a bailarinas indocumentadas.
Por la tarde trascendió que en el domicilio de la madre del ejecutado se notó la presencia de todos sus familiares, lo que confirma el reporte del “levantón” que recibió la policía municipal, del cual no avisó a la policía estatal. Pero no fue en la calle ubicada a espalda de la discoteca, sino una cuadra antes, a la vuelta del restaurante “La Palapa” y a espaldas de la base de la Cruz Roja.
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